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Esta historia me la contó un tipo de estos que te enganchan en una conferencia a la que asistí cómo ponente en temas de emprendimiento.
Contaba el ponente que llego en uno de sus viajes a un pueblo en medio del desierto y que estuvo preguntando cómo se sobrevivía en entornos tan duros.
El que le contestaba era una especie de alcalde o mandamás de la zona y le estuvo contando una historia de las que marcan.
Le contó que cada 200 años, los vientos mueven la arena y las dunas y sepultan el pueblo.
-¿O sea, que cada 200 años el pueblo desaparece?
-Sí y lo reconstruimos unos metros más allá, aunque sabemos que en 200 años va a volver a sepultarse.
La lógica europea saltó enseguida
¿Y porque no movéis el pueblo muy lejos de aquí?
El europan man había encontrado la solución a generaciones de sepultamientos.
La respuesta me dejó muy parado, contaba el tío con una botella en la mano.
Le contó que ya lo sabían (a esta gente no le tienes que contar nada porque sobreviven en condiciones mucho más chungas que tu y no son tontos aunque no van a Media mark) pero que si movian el pueblo más lejos el viento y las dunas no lo sepultarían en 200 años.
-De eso se trata
Pero – continuó el “alcalde”- si solucionamos el problema, ¿qué les ensañemos a las nuevas generaciones?
La sala se quedó en silencio porque la respuesta era la menos esperada, en ese pueblo dejaban un reto a las nuevas generaciones, les daban la tarea de aprender a solucionar un problema, a gestionar una situación y a volver a empezar
Me dejó muy impresionado, querían que aprendieran aun a costa de que sabían que iban a sufrir.
Pero es que el coste del sufrimiento es mucho menor que el coste de no aprender nada, de no tener retos.
Cuando emprendemos o intentamos alguna cosa es fácil sufrir, pasar malos momentos o que se nos sepulte el negocio, pero lo importante es volver a construir el pueblo, volver a intentarlo, volver a renacer.
Porque al final la gracia es la lucha diaria y la superación de retos.
En Ultreia Projects acabamos los proyectos con una formación al cliente para que aprenda a gestionar cualquier problema que le surja en su página web o tienda online, yo siempre voy a estar, pero necesito das esa formación que libera al cliente de cualquier dependencia hacía mi, nos van los retos, nos va la marcha ¿y a ti?
Feliz día
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